La selección de personal es un proceso vital para la organización. Debe estar enmarcado dentro de una estrategia y ser coherente a las necesidades de la empresa. Existen herramientas que permiten encontrar los mejores candidatos. De esta forma, el test psicológico se destaca como un tipo de test laboral que arroja resultados objetivos y claros.
Según Chiavenato (2019), en el libro Administración de recursos humanos, estas herramientas “constituyen una medida objetiva y estandarizada de modelos de conducta”. Así, de manera precisa, podrás dar con el personal adecuado, con las aptitudes, habilidades y destrezas necesarias.
Los test psicológicos imprescindibles en el reclutamiento
Sin embargo, una prueba por sí sola no es suficiente para medir el desempeño, grado de conocimiento y habilidades mentales de una persona. Es imprescindible utilizar un conjunto de pruebas o batería psicológica.
Los exámenes psicológicos a elegir dependen del tipo de puesto y organización, así como de las necesidades de la empresa. Una de las formas de planificar las baterías consiste en hacerlo según el nivel que el puesto demanda.
Aquí ofrecemos algunos de los test que se emplean con mayor frecuencia:
1. Matrices progresivas de Raven: El Test de Raven mide la capacidad intelectual a través de la comparación de formas y el razonamiento por analogías. No importa el nivel de conocimiento adquirido por la persona, debido a que proporciona información sobre la capacidad de abstracción, la percepción y la inteligencia fluida. Consiste en encontrar la pieza que falta en una serie de figuras que se presentan.
2. Test Dominó: Es un test psicotécnico que mide la inteligencia general de los sujetos, de acuerdo a sus capacidades lógicas. Consiste en 48 ítems con un grupo de fichas de dominó y un espacio en blanco. El objetivo es seleccionar el número que corresponde a la ficha, que va en el espacio faltante.
3. Inventario de personalidad de Jackson: Este diagnóstico psicométrico delimita los rasgos más sólidos y las predisposiciones en el comportamiento, en distintas situaciones y contextos. En pocas palabras, con este inventario se consigue perfilar una tendencia de la personalidad.
4. 16 Factores: Es un cuestionario de la personalidad, creado por el psicólogo Raymond Cattell. En esta prueba psicométrica, se ponen a la luz atributos del individuo como: la estabilidad, sensibilidad, autosuficiencia, perfeccionismo, dureza, ansiedad, tensión, autocontrol, independencia y perfeccionismo.
5. Habilidades mentales de Thurstone: Es un compendio de pruebas que miden habilidades primarias. Los factores que mide son: comprensión verbal, fluidez verbal, comprensión numérica, aptitud espacial, memoria mecánica o asociativa, rapidez perceptiva y razonamiento general. Con esta evaluación, se podrá tener un panorama claro sobre las fortalezas y debilidades del aspirante.
6. Técnica de Cleaver: Es un estudio de personalidad que permite hacer una proyección del comportamiento del individuo, en situaciones normales, con motivación o bajo presión. Permite vislumbrar competencias laborales idóneas, o determinar si su forma de ser se adecua a una profesión en particular.
8. Test de Allport: Las mediciones psicométricas no solo determinan la capacidad de razonamiento o las tendencias de personalidad. Dentro de este abanico de posibilidades, también encontramos, exploraciones como estas, donde se pueden medir los principios y valores éticos del individuo.
9. Human Side: Es un método que descubre los rasgos predominantes de una persona en cuatro áreas: forma de comportamiento, intereses, valores profesionales y distinciones de pensamiento.
10. Test de Moss: Son este análisis se pueden perfilar estilos de liderazgo y gerencia. Se evalúa la capacidad de identificar problemas y cómo afrontarlos.
Emplear las pruebas indicadas en el proceso de reclutamiento y selección es determinante. Las bases estadísticas y los informes que estos estudios proporcionan son datos que ayudarán en la toma de decisión. Esperamos haberte ayudado.