La nueva normalidad está representando diversos retos para las organizaciones y para su capital humano. El estrés, la preocupación por cuidar de un familiar enfermo, la presión de hacer más actividades en una jornada de trabajo inferior, son aspectos que pueden influir en el desempeño de los trabajadores. Ante estos cambios, es necesario actualizar las funciones del test de honestidad.
Funciones de las pruebas de honestidad en la nueva normalidad
Como responsable de recursos humanos, debe ser de tu interés la adaptación de las evaluaciones de honestidad, ya que tienes que aplicarlas correctamente para obtener los resultados más fiables. A continuación, te explicamos las funciones de dichas pruebas en la nueva normalidad y algunas alternativas para solucionar los retos que se presentarán.
1. Motivar al empleado a informar si tiene síntomas de COVID-19. Algunos trabajadores tienen miedo de perder su trabajo y, por ello, no avisan a sus superiores sobre los síntomas por coronavirus. Cuando el colaborador no tiene la precaución de informar sobre sus padecimientos, el riesgo de contagiar a otros es inevitable.
Para obtener respuestas libres de encubrimientos, puedes aplicar estos consejos.
- Relaja al trabajador. Expresa con claridad que el contagio por el virus no es motivo para perder su empleo. Anima al personal a expresar su preocupación si sospecha que se ha infectado o ha estado en contacto estrecho con un familiar enfermo.
- Canales de comunicación. Asegúrate de informar sobre los medios para que el trabajador informe sobre sus síntomas. Si no lo haces, se verá obligado a acudir a su empleo y expondrá a los demás.
- Averigua si es capaz de informar de un contagio por parte de sus compañeros. La amistad entre colaboradores no debe ser motivo para ocultar los contagios dentro de la planta laboral. Debes preguntar al evaluado si es capaz de informar sobre un compañero que presenta síntomas de COVID-19.
2. Depuración exhaustiva de mentiras por desesperación para conseguir un empleo. Si necesitas contratar personal, es posible que la desesperación motive a los recién desempleados a mentir para solicitar una vacante.
Es conveniente analizar la reacción del candidato para determinar si expresa la verdad o miente para conseguir el trabajo. Te recomendamos que realices el test vía videollamada. Así, podrás ver las reacciones faciales y reconocer en el tono de su voz si hay aplomo o desesperación por estar desempleado.
No dudes en preguntar. Tienes que evaluar con razonamientos, no cegado por el sentimentalismo. Si el candidato viene de una empresa, ¿por qué razón esta optó por retirarlo de su planta laboral? Pregunta al candidato sobre este punto, pide detalles. Cuestiona sobre si puedes pedir más informes en su anterior trabajo, el titubeo puede desenmascarar la falsedad.
3. Averiguar sobre la actual situación de su historial de crédito. La pandemia obligó a muchos a pedir préstamos para cubrir gastos médicos o del hogar. Algunos de estos créditos podrían haber quedado pendientes de pago. Un trabajador endeudado más allá de sus posibilidades puede verse tentado a cometer robos o aceptar sobornos.
Cuestiona a tu personal si durante la pandemia se ha visto obligado a pedir préstamos y si ha logrado cumplir con todos sus compromisos. Si todavía tiene pendientes, pregunta sobre su plan para pagar. Interroga a tu colaborador sobre qué haría en caso de que un acreedor le exigiera el pago inmediatamente.
Evalúa la honestidad de los candidatos y de tus trabajadores. En todo momento, cuida la integridad física de tu organización, pero vigila la salud financiera y de tu empresa. Contacta a expertos para aplicar estas pruebas con éxito durante la nueva normalidad.
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